14 Jun Diario 17: ¿Match?

Todos sabemos que en verano la cosa se anima. 

Hace casi un año que escribí estas líneas con una idea muy guay de blog, a las dos semanas en Madrid se me pasó por completo a donde iba con esto.

Pero, vuelve a ser casi verano e irremediablemente vuelve el sentimiento de que algo se cuece y algo se anima. 

Hace un año, un año justo, conocí a Carlos y a Gaspar de ONG ASU, nos habíamos presentado en el evento de Solidaridad de Telva y me dieron muy amablemente sus correos y me dijeron “para cualquier duda que tengas, de verdad Teresa, aquí estamos para apoyarnos” así que unos meses más tarde me presenté con una buena lista de preguntas sobre subvenciones y maneras de organización en el tercer sector para ellos. Fueron amabilísimos y me dedicaron una buena parte de la mañana a resolver todas mis dudas. 

Una cosa que me comentó Carlos hablando del tema de los socios era que eran como una lluvia fina que lo cubre todo, y que es de lo mejor que tenemos las fundaciones y el tercer sector, gente que te apoya mensualmente y que siempre están como base de todos tus proyectos.  

También me dijo que hacer socios era como ligar. Que es imposible que salga especialmente bien a la primera, que había que estar y dedicarle tiempo y cariño, al principio jugar un poco a lo de “yo soy especial porque…”, y luego el congeniar y el larguísimo etc para que ya llegue a una relación consolidada. 

Luego llegó el verano y con él las historias de mis amigas y ese ambiente coqueto en el que envuelven los atardeceres tan tardíos. 

Hacer socios es un don, es congeniar, es tener una buena base (eso siempre), y es saber que puedes ganar, es ir sabiendo que hay una gran posibilidad de ganar. Porque ser pesado o inapropiado es ser un coñazo, esa es una métrica que sirve para todo en la vida. Y en el tercer sector siempre estamos cerca de esa fina línea entre ser un coñazo, dar pena, concienciar o sensibilizar. 

No queremos ser Greta pero a la vez, joder ¡Estamos en la mierda! 

¿Estamos en la mierda? Yo no, tú tampoco. Ellos, muchos, sí. Y por eso necesitamos esa fina lluvia, por salir de la mierda, que es un proceso y hay mucha gente que ya está fuera. Simplemente estar en la propia Escuela es estar fuera del fango. 

Y al fin y al cabo, ¿Qué es ser inapropiado? contar desgracias que están, que no queremos que sigan pasando, que hay que parar y que solo se pueden parar dándoles visibilización, denunciando las y pidiendo ayuda. 

En este año me he dado cuenta que se necesitan muchos matchs, pero hay que tener muy claro con quién. No quiero incomodarte, pero tampoco quiero a gente que solo mira para otro lado, y que no sabe ser un coñazo por las cosas que le importan, o que no le importan, lo último que quiero es quitarte el sueño (por ahí si que no) pero sí que quieras ayudar. Que veas que no cuesta nada. 

Bueno, si cuesta, igual un poco. Igual ¿5 euros? ¿10?, cuesta lo que tu quieras, porque el hecho de que estés ya es mil veces más que no estar. Y porque yo daba 5 como estudiante mientras trabajaba los sábados y juro y perjuro que no se notaba nada. 

Como goal en 2023 tenemos llegar a los 200 socios. Nos faltáis 65, 65 almas de cántaro que nos ayudáis a ayudar, a parar y a decir basta a no dar el coñazo. Simplemente (aunque 0 simple y 100% buena gente) que nos ayudáis a dar comidas, educación y oportunidades a quienes no las tienen. 

Venga, ¿Match?

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